Cuando mencionamos EPI hacemos referencia al equipo de protección individual que consiste en elementos para proteger el cuerpo de agentes externos. Estos suelen ser cubrebocas o mascarillas, guantes, bata y gafas.

Actualmente, debido a la pandemia por covi-19, el temor a contagiarse se ha ido apoderando de la población. Esto cada vez se hace más una rutina que se tiene que volver costumbre y que incluso, son muchos los que están fabricando algún EPI de manera manual en casa. Recordemos que el EPI es un equipo de protección individual, que se usa con el objetivo de protegerse de algún riesgo para la salud o seguridad, como una infección.

Existen diferentes tipos de EPI dependiendo de cuál sea su propósito. Por lo tanto, deben cumplir una serie de características, y estar evaluados para su utilidad. En este blog te explicaremos  todo lo que debes saber sobre ello.

¿En qué consiste el EPI?

Un EPI, como se mencionó al inicio, es un dispositivo de protección de uso personal y estos actualmente ya deben utilizarse como parte de una rutina diaria de protección. Cabe recalcar que, para que el dispositivo cumpla su objetivo de protección, debe ser cuidado y mantenido correctamente. Son un elemento básico para cualquier estrategia de control de riesgo.

¿Para qué se utilizan?

Al tratarse de diferentes tipos de elementos, sus usos también son diversos. En primer lugar, un EPI puede utilizarse para un riesgo menor, dentro de esta categoría están, por ejemplo, los cascos o las gafas, ya que estos sirven para pequeños choques o golpes.

Y posteriormente, los EPI que son más frecuentes son de uso sanitario. Estos suelen emplearse para protegerse frente a una infección. No obstante, debemos destacar que también existen otros dispositivos específicos para casos de radiación o contaminación.

EPI frente al Covid-19.

Actualmente, la gran mayoría de EPI se están fabricando y utilizando para proteger al personal sanitario frente a la infección por coronavirus. Es una medida muy importante debido al alto riesgo de transmisibilidad y de contagio. Además, para que un EPI sea válido debe cumplir una serie de características. Es por eso que los sistemas sanitarios están saturados y faltantes de materiales, ya que muchos centros no estaban preparados para una pandemia de este grado.

Estos equipos están formados, en primer lugar, por la mascarilla o cubrebocas, este elemento permite que el personal sanitario pueda estar cerca de una persona con síntomas, protegiendo la vía respiratoria, como segundo lugar está el equipo de guantes sanitarios, los cuales deben ser desechables. Junto a esto, lo recomendable es llevar un uniforme hermético que proteja de cualquier posible salpicadura de fluidos del paciente. La bata habitual no parece ser suficiente.

Y por último se recomienda también, que el EPI incluya protección ocular, es decir, que conste de unas gafas que detengan el acceso de los fluidos dirigidos a los ojos. Pueden ser gafas integrales o pantallas faciales completas.

Recordemos que para que un equipo de protección individual sirva, este debe cumplir ciertas características. Lo ideal es informarse correctamente antes de utilizar uno, ya que requieren conocimientos para saber ponerlo y quitarlo sin riesgo de contaminarse.